Algunos productos de limpieza y cosmética contaminan tanto como los vehículos

La contaminación del aire es un asunto tan serio que los expertos la sitúan entre los cinco mayores riesgos mundiales para la salud. Un aspecto que preocupa especialmente es la contaminación por material particulado que, tal y como acaba de revelar un estudio, procede cada vez menos de los coches, y más de productos de uso diario en cualquier hogar, como limpiadores, perfumes, pinturas y, en general, todo aquello que contenga químicos con compuestos derivados del petróleo.

Mientras el transporte es cada vez más limpio, otras fuentes de contaminación cobran más importancia. Lo asegura Brian McDonald, científico que ha participado en este revelador estudio liderado por NOAA, la administración oceánica y atmosférica de Estados Unidos. Sus palabras las refrendan los resultados de este trabajo. Hasta la fecha, los organismos oficiales estimaban que el 75% de las emisiones COVs (compuestos orgánicos volátiles) fósiles procedían de fuentes relacionadas con los combustibles. Ahora ese peso se reduce sensiblemente para pasar al 50%. La otra mitad, procede de productos químicos de uso diario y totalmente extendido. “La cantidad de COVs emitidos por productos de consumo e industriales multiplica por dos o incluso por tres las estimaciones de los inventarios de contaminación atmosférica”.

Las conclusiones sorprenden e impactan en muchos sentidos. Uno, fundamental, la concentración de material particulado en los hogares. Tal es el cambio que se ha operado que, según los expertos, la ciudadanía está diez veces más expuesta a altas concentraciones de COVs de puertas para adentro que para afuera, en las calles de cualquier ciudad. “Lo que usas en tu vida diaria impacta en la contaminación del aire”, subraya McDonald tras su participación en este trabajo, que ha combinado el estudio de las estadísticas sobre producción química, con la medición de la calidad del aire en Los Ángeles y la evaluación de la contaminación en espacios de interior.

Con todo ello, se desploma la idea general de que camiones, coches o motos son los grandes culpables de la falta de calidad del aire que respiramos. “Eso era cierto hace algún tiempo”. Pero ya no, sostienen los expertos. Por ello, ahora proponen que las medidas aplicadas para limitar las emisiones a la atmósfera procedentes del transporte se adapten y extiendan a otros campos. “Funcionaron tan bien que, para seguir avanzando en la mejora de la calidad del aire, los esfuerzos en materia de regulación deberían diversificarse, apunta al hilo Joost de Gouw, coautor del estudio que ha publicado la revista Science.

Los químicos presentes en pesticidas, tintas de impresora, adhesivos, y productos de limpieza y cuidado personal son algunos de los que, hoy día, originan al menos la mitad de las COVs emitidas en hasta 33 ciudades industrializadas. Y esto es clave, puesto que estas partículas que flotan en la atmósfera constituyen un severo riesgo para la salud que, hasta ahora, no estaba suficientemente dimensionado.

Por eso recomendamos el uso de Simple Green, un desengrasante limpiador multiusos, eficaz alternativa y sustituto a los detergentes, químicos y solventes peligrosos que dañan al medio ambiente, es biodegradable, no siendo solamente biodegradable Simple Green®, si no que también ayuda a la biodegradabilidad de hidrocarburos, no es tóxico, no es inflamable, no es abrasivo, no contiene fosfatos y es concentrado, características que hacen de Simple Green® un producto amable y respetuoso con el medio ambiente.

Tanto su biodegradabilidad como su no toxicidad han sido comprobados mediante una gran cantidad de pruebas realizadas por laboratorios privados y autoridades en los Estados Unidos, Canadá, Europa y México, resultando ser 23 veces menos tóxico que los productos que cumplen con los lineamientos de seguridad oficial exigidos por los Gobiernos mencionados, superando todos los requisitos de la Agencia de Protección Ambiental (E. P. A.) y (U.S.D.A.) en los Estados Unidos así como de E.M.P.A. de Suiza, Reconocido por la NSF como limpiador dentro del sector Alimentario.