El colchón es uno de los sitios en los que más tiempo pasamos. Una media de ocho horas al día. Con semejante nivel de uso, someter esta pieza del hogar a una limpieza periódica se convierte en una máxima que no siempre se cumple. La dificultad aparente de la operación y la falta de tiempo son algunos de los argumentos que pueden emplearse para ir postergando ese momento. Sin embargo, no descuidarse es fundamental para garantizar el descanso y la salud. Por ello, te contamos cómo mantener tus colchones limpios con soluciones naturales, que te resultarán además muy útiles para eliminar restos de orina o incluso de vómitos.

Limpieza periódica del colchón.

Con una vida útil estimada en una década, está claro que un colchón no puede (o no debe) plantarse sobre el somier y seguir en él, sin limpieza alguna, hasta el fin de sus días. Entre las razones para ello, los ácaros que se acumulan en él por centenares de miles y que pueden poner en jaque tu salud y tu descanso.

Así, aunque lo ideal sería limpiar en profundidad el colchón cada trimestre, dos veces al año, por ejemplo en la transición del verano al otoño y, luego, en la de primavera a verano, sería más que recomendable someter este elemento a una limpieza a fondo. Para ello, con los siguientes pasos sería suficiente:

1. Colocar el colchón en un lugar al aire libre y en el que le dé el sol, como puede ser una terraza, y dejarlo durante al menos un par de horas.
2. Una vez se haya aireado bien, el siguiente paso sería sacudirlo de manera que se desprenda de él todo el polvo así como otros elementos acumulados. Ojo con las esquinas y las costuras, puesto que suelen concentrar mucha suciedad.
3. Una vez hayas sacudido el colchón con fuerza y por todos los lados, será el momento de aplicarle un limpiador de vapor o vaporeta. Con las altas temperaturas generadas durante esta operación, lo que estarás haciendo será matar las bacterias presentes en el colchón.
4. La limpieza proseguirá mezclando agua y bicarbonato. Empapa un trapo con este producto, escúrrelo bien (el exceso de agua puede ser perjudicial) y frota sobre todo el colchón.
5. Cuando hayas aplicado el producto será el momento de dejar secar el colchón al sol. Una vez esté absolutamente libre de humedad, puedes aplicarle algún producto específico frente a los ácaros y devolverlo a la cama.

Manchas de vomito en el colchón.

Los pasos anteriores te permitirán mantener el colchón a raya pero, ¿qué pasa con los imprevistos? Manchas como las de vómito o las de orina no solo comprometerán la limpieza, sino que pueden ser además muy frecuentes en viviendas en las que haya niños pequeños.

Lo bueno es que, para ambas situaciones, existen también remedios naturales que ayudarán a eliminar cualquier resto. Así, para limpiar manchas de vómito que hayan llegado a penetrar en el colchón tendrás que volver a echar mano de la vaporeta y aplicarla sobre la zona afectada. Es probable que tengas que repetir la operación varias veces para que sea efectiva.

Si necesitas apoyo, puedes probar frotando con intensidad sobre la mancha con una esponja empapada (pero sin exceso) en agua caliente y jabón natural. Repite este tratamiento y el anterior tantas veces como haga falta y, no lo olvides, deja que el colchón se seque completamente al aire libre.

Manchas de orina en colchón infantil.

Respecto a las manchas de orina, si algo es determinante es actuar tan pronto como se detecten, a ser posible antes de que se hayan secado. Para eliminar la mancha, habrá dos alternativas naturales.

1. La primera será a base de bicarbonato, un producto imprescindible para la limpieza sostenible. Así, mezclado con agua caliente, habrá que emplearlo para frotar sobre la mancha hasta que se elimine.
2. La segunda alternativa es usar vinagre, también clave para sustituir los limpiadores comerciales. Como en el caso anterior, se debe reducir en agua caliente y, si se desea, se pueden agregar unas gotas de aceite esencial de lavanda. Con eso, se debe frotar en la mancha con una esponja hasta que ceda.

Sea cual sea la alternativa que escojas, tras aplicarla tendrás que dejar el colchón secando al aire libre. Si no fuera posible, emplea un secador de pelo hasta que elimines por completo la humedad.

Pero, ¿sirve este método para machas de orina de mascota en el colchón? En principio no y, de hecho, la limpieza en este supuesto se complicará. Para eliminarla, opta por una mezcla al 50% de vinagre blanco y zumo de limón. Empapa una esponja y frota sobre la mancha con intensidad. Es probable que necesites tratamientos extra. Por ello, a continuación repite la operación, pero ahora con agua y alcohol y, a continuación, con agua y bicarbonato. En este punto, tanto la mancha como el mal olor deberían haberse mitigado.

Con estos remedios naturales, podrás mantener tus colchones en las condiciones de higiene necesarias para garantizar tu salud y tu descanso. Como en todo, la prevención también ayudará, por ello, los expertos recomiendan cambiar las sábanas con asiduidad (por lo general cada semana), no hacer la cama inmediatamente, para permitir que se ventile, y poner el colchón en posición vertical cada cierto tiempo para sacudir el polvo y los ácaros acumulados.

Instrucciones para limpiar colchones con Simple Green.

En caso de duda, haga siempre una pequeña prueba en la mancha primeramente.

1. Al limpiar la suciedad difícil, humedezca previamente la superficie.Esto ayudará a que Simple Green penetre en la suciedad y facilite su limpieza.
2. Aplicar la solución Simple Green. Dejar el producto en remojo durante un minuto más o menos para que la suciedad y las manchas de grasa se disipen.
3. Frotar en caso necesario. Frotar con un cepillo suave o un paño no abrasivo proporciona agitación, lo que ayudará a eliminar la suciedad y garantizará una limpieza absoluta y una superficie sin residuos.
4. Enjuagar con agua limpia. Enjuagar limpiando con una esponja de microfibra humedecida o un paño no abrasivo para garantizar una superficie sin residuos. Las superficies en contacto con la comida y con mascotas se debe enjuagar con abundante agua limpia.
5. Secar y abrillantar con una esponja limpia de microfibra, un paño no abrasivo o toallitas de papel.

Para conseguir superficies reflectantes, acabados brillantes, y vidrios y metales abrillantados, este paso final dejará una superficie sin marcas y una limpieza resplandeciente.

Recomendación de dilución.

Suciedad difícil.

Derrames de grasa, restos de comida pegados, superficies sucias, aceite de cocinar, lápiz, etc.

• Aplicar Simple Green sin diluir.

Limpieza diaria moderada.

• Diluir aproximadamente 28 g de Simple Green en 1 vaso de agua.

Limpieza suave.

Polvo y huellas sobre superficies reflectantes o muy brillantes.

• Diluir aproximadamente 28 g de Simple Green en 4 vasos de agua.