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Hay quienes ven los posos del café como una vía para leer el futuro o, más en el ámbito de la sostenibilidad, para su uso como compost. Pero, ¿y cómo producto para la limpieza para tu hogar? Si nunca habías mirado de esa manera a los restos que, mañana a mañana, genera tu cafetera, te estás perdiendo una opción muy recomendable para limpiar a fondo, para mantener lejos de tu casa los malos olores o para ahuyentar a las hormigas. Atento a lo que los posos del café pueden hacer por ti:

1. Si se te resiste una mancha incrustada…

¿Ya no sabes cómo enfrentarte a esas manchas difíciles que se resisten a abandonar tu encimera, tu cocina, la vajilla o cualquier superficie apta para el lavado? Pues no dudes en echar mano de los posos del café. Una vez hayan perdido la humedad, mezcla un poco de detergente con los posos secos y, aplicados sobre el lugar elegido, ayudarán a combatir cualquier mancha seca que, hasta ahora, se te resistía.

2. Si tu mirada no para de desviarse hacia un arañazo en un mueble…

Entonces, lo mejor será que pongas alguna medida. Una posibilidad que tienes muy al alcance si el mueble es de tono oscuro es fabricar una masa con los posos de café y agua y aplicarla sobre el arañazo con un pincel o un algodón. El arañazo seguirá ahí pero, sin duda, habrás dado un paso adelante al lograr disimularlo con esta solución natural.

3. Si tu sentido del olfato es sensible…

En ese caso, seguramente te ponga de los nervios la mezcla de olores en la nevera; el hedor que en ocasiones mana de los desagües o esa caja de arena del gato que, por más que la limpies, se resiste a dejar de oler. Estas situaciones pueden combatirse con los posos del café que, una vez secos, contendrán estos olores. Si los aplicas en desagües, mezcla unos pocos con una buena cantidad de agua y vértela. Para la caja del gato, siempre que a este no le resulte molesto el olor a café, puedes esparcir algunos granos secos sobre la base de la misma. Una pequeña cantidad de posos de café secos, introducidos en un vaso en la nevera, mantendrá también lejos de ella los malos olores.

4. Si una fila de hormigas atraviesa de cocina de punta a punta…

Echa un ojo al punto de origen y destino de los insectos y no dudes en espolvorear posos de café que no estén húmedos en esos lugares estratégicos y en otros como pueden ser puertas o ventanas, para que a esa ristra de insectos, tu casa deje de parecerle tan atractiva.

Estas son solo algunas de las posibilidades que el café puede ofrecerte para que la limpieza del hogar sea cada vez menos dependiente de productos potencialmente tóxicos y, además, más caros que unos restos que, tal vez, hasta ahora solo tenían como único destino el cubo de la basura.