(Español) Cómo limpiar de manera natural: plata, cobre y otros metales
Plata, cobre, oro… ¿cómo limpiar estos metales sin dañarlos ni perjudicar el medio ambiente? Productos de limpieza agresivos, como alcohol o amoníaco, no son los mejores para la limpieza de metales, ya que pueden producir daños y deteriorarlos.
Es posible, sin embargo, utilizar algunas alternativas naturales y económicss que nos permiten una limpieza sencilla y eficaz de estos y otros metales. Echemos un vistazo a algunos consejos caseros para limpiar objetos de plata, cobre, oro y otros materiales metálicos.
1. Plata.
La plata es un metal particularmente popular por su brillo, pero las manchas, rayones y óxido pueden arruinar su belleza. Para quitar las manchas causadas por la oxidación, es posible utilizar una crema limpiadora preparada en casa a base de bicarbonato de sodio con un poco de agua. Con ella, debemos frotar con delicadeza los puntos más problemáticos con ayuda de una esponja suave. Las joyas de plata pueden dejarse brevemente en agua caliente a la que añadamos unas gotas de jabón líquido y una pizca de sal. Después, hay que limpiarlos suavemente.
2. Cobre.
Para limpiar el cobre podemos utilizar vinagre de vino blanco con un poco de sal, aplicado con un atomizador directamente sobre la superficie manchada, y frotando suavemente tras aplicarlo. Por último, se enjuaga con agua caliente y se seca con un paño suave.
Otro producto milagroso para la limpieza del cobre se hace con zumo de limón, se puede aplicar con una esponja sobre los objetos para hacer el pulido, o con el propio limón cortado por la mitad
3. Latón.
El zumo de limón es también una excelente solución para la limpieza de objetos de latón (aleación de cobre y zinc). En este caso, es necesario mezclarlo con bicarbonato de sodio hasta obtener una consistencia similar a la de la pasta de dientes. Con esta mezcla se frota la superficie con un paño o una esponja, se deja reposar cinco minutos y luego se lava. También la sal y la harina, mezcladas a partes iguales , y añadiendo un poco de vinagre, se pueden utiliza para frotar el latón.
4. Acero inoxidable.
Será más fácil eliminar las manchas del acero inoxidable después de ser tratado con aceite de oliva. El aceite es perfecto para hacer desaparecer los halos (esas manchas causadas por el fuego). Para el pulido de acero inoxidable y el cromo, así como para eliminar las manchas de cal, el mejor remedio es usar vinagre puro de vino blanco.
Otro consejo es mezclar media taza de bicarbonato de sodio con 2 cucharadas de agua hirviendo y usar la mezcla para limpiar el acero con la ayuda de una esponja.
5. Aluminio.
Los objetos de aluminio se pueden limpiar con agua y detergente líquido, enjuagándolos y secándolos muy bien inmediatamente después para evitar aureolas. Los fondos de ollas de aluminio con suciedad adherida, pueden dejarse a remojo en agua tibia para facilitar la limpieza.
6. Bronce.
El bronce se puede limpiar con agua y jabón, para después enjuagar con agua tibia y secar con un paño suave. En el caso de bronce tallado, puede utilizar un cepillo suave para limpiar con agua y zumo de limón.
7. Oro.
Para limpiar el oro podemos recurrir al jabón natural líquido y al bicarbonato de sodio. Así, podemos hacer una crema con una cucharadita de bicarbonato de sodio y una cucharada de jabón líquido y usar el compuesto obtenido para limpiar objetos de oro. Hay que procurar enjuagar y secar cuidadosamente tras el proceso de limpiado. Por su parte, la joyería de oro se puede limpiarse fácilmente después de dejarla sumergida durante 1 hora en agua más un poco de zumo de limón.
8. Hierro fundido.
Para limpiar este material podemos usar agua y jabón natural. Enjuague con agua tibia y seque inmediatamente. Para eliminar los restos de suciedad más difíciles, se puede limpiar el hierro fundido con polvo de piedra pómez.
9. Hierro.
Si se trata de hierro esmaltado, podemos lavar los objetos con agua y jabón. El óxido puede eliminarse frotando la parte oxidada con lana de acero. Si hay manchas de óxido, use zumo de limón o vinagre, mezclado con sal o bicarbonato de sodio.
10. Estaño.
El estaño puede limpiarse con agua y jabón o con una mezcla cremosa preparada con bicarbonato de sodio y sal, agregar zumo de limón hasta obtener la consistencia deseada.