
Pasta de Dientes. Mil y una utilidades
La pasta de dientes es un clásico de la higiene bucal que, según la industria, estaba ya en uso en el antiguo Egipto y, también, en la Grecia clásica y el Imperio romano. De la cáscara de huevo y las cenizas de pezuñas de buey que estaban presentes en los dentífricos primitivos, se ha pasado en la actualidad a una fórmula que apunta los motivos por los que la pasta de dientes es todo un multiusos.
Agentes antibacterianos y antifúngicos, detergentes y productos para la limpieza como el flúor, sustancias aromatizantes o componentes con propiedades para la cicatrización son algunos de los que suelen estar presentes en buena parte de las pastas dentales disponibles en el mercado. Idónea para la limpieza y la salud bucal, las propiedades de esta composición se trasladan a otros muchos aspectos que, en adelante, pueden derivar en que tu pasta de dientes se convierta en un imprescindible para la limpieza del hogar, entre otros usos.
Usos de la pasta de dientes.
Salud.
- Calmante para las picaduras. ¿Te ha picado algún insecto y no hay manera de calmar las molestias? Aunque lo recomendable en cualquier caso es consultar con profesionales expertos, una solución de urgencia para aliviar el malestar será aplicar pasta de dientes sobre la picadura. El remedio también ayuda en caso de quemaduras.
- Remedio contra espinillas. Quien se las vea habitualmente con el acné o aquellos a los que ocasionalmente les haya salido un grano con pus en la cara, podrán encontrar también una ayuda en el dentífrico. Aplicarlo sobre la espinilla favorecerá que se seque a mayor velocidad. No obstante, el método no es recomendable para quienes tengan la piel especialmente sensible.
- Tratamiento para moretones. Como ocurría con los ejemplos anteriores, untar crema dental sobre un moretón, preferiblemente durante la noche, ayudará a que este desaparezca mucho más rápido.
Higiene personal.
- Desodorante para manos. El buen olor que deja en la boca es uno de los aspectos clave de la pasta de dientes. Y estos resultados son extrapolables a otros campos. Así, si acabas de cortar ajo, cebolla o cualquier otro alimento cuyo olor ha quedado impregnado en tus manos, lavártelas con pasta de dientes ayudará a eliminar cualquier rastro.
- Brillo para uñas. A aquellos que busquen una fórmula casera y de bajo coste para mantener sus uñas limpias y con brillo, la pasta dental les ofrecerá una solución que, además, ayudará a fortalecerlas. Para ello, será suficiente con aplicar un poco de crema dental sobre las uñas y frotarla con suavidad.
Limpieza.
- Quitamanchas. En este punto, la pasta de dientes es verdaderamente versátil. Permite acabar con manchas de cera, lápices de colores o pintalabios, así como de bebidas como café o zumos de frutas, entre otras opciones. Para sacarle partido, solo habrá que poner un poco de pasta en un trapo y frotar con él la zona afectada para, posteriormente, aclarar con agua. Es posible que sea necesario repetir la operación varias veces, pero funcionará.
- Calzado, como nuevo. Lo mismo sucederá con las zapatillas deportivas sucias y con el calzado desgastado. En ambos casos, habrá que repetir el mismo proceso que con las manchas: aplicar la pasta con un trapo o un cepillo, frotar y enjuagar.
- Aliado contra el mal olor. Si funciona para la boca y para las manos, ¿por qué no para eliminar el mal olor de otros utensilios y superficies? Como imaginarás, la pasta de dientes lo consigue y su uso por tanto es adecuado para este fin en envases para la comida o incluso en biberones. Para sacarle partido, solo será necesario extender un poco de crema en un cepillo y frotar con él intensamente para acabar la operación eliminando cualquier rastro del producto.
- Remedio contra las marcas de humedad. Si sobre tu mesa de madera ha quedado marcado el clásico círculo que dejan los vasos, tanto con bebidas frías, como calientes, la pasta de dientes puede ayudar. Aunque estos restos son difíciles de tratar, se recomienda intentarlo aplicando sobre la marca la pasta de dientes, que tendrá que frotarse con suavidad. Después será necesario retirar bien el producto y tratar la madera con el abrillantador habitual.
- Limpieza de plata y diamantes. Pulir la plata es otra de las utilidades de la pasta de dientes que, para ello, tendrá que emplearse sobre un cepillo de dientes que, a su vez, se pasará por el objeto de plata. Tras el paso anterior, todo lo que habrá que hacer será enjuagar la pieza y pulirla con un trapo seco y suave. Si tienes algún diamante, la misma solución te resultará muy útil.
- Solución para planchas que no deslizan. A fuerza de uso, las planchas se suelen resentir. Si le ha pasado a la tuya y ya no sabes qué hacer para que vuelva a deslizarse en la ropa como antes, aplica una capa de pasta de dientes, frótala bien y retira el producto completamente. Aunque suene obvio, ten en cuenta que deberás probar esta solución en frío y con el electrodoméstico desenchufado.